28/2/12

Querido docente que hoy estás de paro:

Te voy a escribir a vos, que te dedicas con pasión a la docencia, que elegiste ser educador por convicción y no por descarte. A vos que en los ratos libres estás pensando en un libro, un recorte o una actividad para tus alumnos. A vos, que no discriminas a ningún chico, ni tenés pre conceptos (si son los hijos de tal o cual). A vos, que te interesa que la educación sea un instrumento fundamental en la vida de las personas. A vos, que estás afiliado a un sindicato y que te interesa participar para dignificar cada día más la actividad que has abrazado.

A los otros maestros, si es que se los puede llamar de esa manera, no. Si vos querés, contáles. Por ahí todavía guardás alguna esperanza y pretendés que interpreten la inmensa responsabilidad de ser un docente, como lo hacés vos.

No necesito aclararte que estoy a favor de todas las reivindicaciones que los trabajadores de la educación han hecho y hacen. Más allá de la defensa de la educación pública, lo estructural y la incidencia sobre la curricula, por encima de todo eso, en la defensa del salario. Por eso he acompañado desde siempre, incluso cuando lo hacían en soledad ante gobiernos indiferentes y ciudadanos preocupados en viajar al Caribe.

Creo que hoy un trabajador docente, por cuatro horas de trabajo frente a la clase y otro tanto de trabajo preparatorio debería ganar mucho más de lo que ganan e incluso de lo que están pidiendo. Es más. Creo que el Estado debería considerar un piso de $5000 y luego, junto a los sindicatos, implementar dos negociaciones salariales con alguna medida similar a la ley de recomposición de las jubilaciones. Pero reitero que hoy el piso debería ser $5000.

¿Por qué? Porque conozco muchos trabajadores docentes que corren de un colegio a otro, comiendo un alfajor a las apuradas, casi sin ver a su familia, con carga de estrés, sin tiempo para preparar clases especiales o elegir material, que hacen dos y hasta tres turnos para ganar $4500 o $6200 respectivamente.

De esta manera, con un salario digno por un solo turno, las cosas serían diferentes. El trabajador tendría la posibilidad de dejar uno o dos turnos, planificar actividades con más tiempo, poner mayor atención en su grupo de alumnos, compartir más con su familia y tener mayor vida sindical.

Ahora bien… Debo decirte, querido maestro, que los sindicatos deben hacer una profunda reflexión y autocritica. Deben dejar de ser encubridores, garantes y hasta en muchos casos ideólogos de trapisondas y avivadas que son un robo de dinero al Estado.

De la totalidad de docentes que se encuentran cobrando un salario dentro de la Educación Primaria el 26% se encuentra con licencias. Integrantes de gremios, off the record, reconocen que el 50% de las licencias son truchas o injustificadas. Hay licencias eternas que se arreglan poniendo desde $150 hasta $500 de de vez en cuando a algún profesional y hasta se puede “arreglar” con la junta médica. Todos los docentes lo saben, dan nombres de los que tienen este comportamiento delincuencial, pero nadie quiere dar la cara para denunciarlo públicamente.

En ciudades como Junín, es muy frecuente saber y ver a alguna docente que tiene licencia por algún problema al caminar, precisamente caminando tranquilamente por el parque. O docentes devenidos en famosos cantantes populares, fracasados pero insistentes, que han vivido de licencia en licencia por una lista interminable de razones mientras se pasean por escenarios cantando con alegría y además bajando un mensaje de patria, esperanza y libertad. He oído razones variadas e inverosímiles, pero el record fue una licencia de una maestra que, según un alergista, tenía alergia al polvillo de la tizan (No sé como habrá hecho para estudiar). También he oído que la pobre docente, imagino con su nariz rojiza de tanto estornudar, abrió una linda boutique y además de cobrar dos turnos obtiene muy buenas regalías en su comercio (sin inscribir ante la AFIP) y tiene una empleada en negro a la que le paga la gran suma de $1800 por 9 horas diarias de trabajo de lunes a sábados. Conozco a una docente que mientras estaba de vacaciones, hace dos años, se astilló el dedo anular izquierdo (los primeros días de enero de 2010). Accidente que le sirvió para estar exactamente 327 días cobrando sin trabajar. Lo que a otro trabajador de cualquier rubro le hubiera llevado una recuperación de 20 días, a esta docente, según sus médicos y hasta una junta médica le llevó 327 días. Un caso muy frecuente que me han contado muchas maestras es aquel caso que, a 10 días de dar a luz toman un cargo para luego pedirse la licencia correspondiente. También es frecuente que alguna dolencia muy prolongada se acabe súbitamente tres días antes de culminar el ciclo lectivo y vuelva mágicamente el dolor tres días después de comenzar.

En fin. Muchos docentes conocen estas avivadas, y repito que los sindicatos, no sólo las conocen, sino que interpretan la letra chica del estatuto, en busca de grietas que permitan colar el robo al estado. Habrá dirigentes sindicales que no? Seguro. Pero todavía no he visto nunca una denuncia con nombres y apellidos concretos de toda la corporación mafiosa que nos roba. El agravante es que, ese porcentaje de ladrones, luego deben “enseñar” a nuestros hijos. ¿Qué les van a enseñar? ¿Cómo robarle al estado?

Se podría pagar mejores sueldos a los docentes, si muchos de ellos no robaran los recursos del Estado de esa manera? Seguro que si. Quizá faltaría, pero estoy seguro que se podría más de lo que se ofrece hoy.

Ni a los más barbados revolucionarios líderes sindicales de gremios docentes combativos les escuché una autocrítica sobre este tema.

Por eso, querido maestro, vos que no estás en esa red delictiva, en esa asociación ilícita de dirigentes, médicos, autoridades y docentes, vos que elegiste esta carrera con el corazón, vos que no tenés problema en reconocerte como un “trabajador” de la educación, tenés que participar activamente de un cambio revolucionario en la educación. Metete en el sindicato y sacale la careta a los malos representantes, denuncia a los que roban (te roban), exigí a las autoridades mayor control y defendé tu salario, también de esta manera.

De lo contrario, si no hacemos nada, si sólo reclamamos salarios y dejamos que el descontrol y la avivada sean moneda corriente en la vida diaria de cada escuela, nunca tendremos excelencia en la educación. Será responsabilidad del Estado, de los dirigentes gremiales, de la red delictiva de encubrimientos, de los malos docentes, pero lamentablemente, de la mayoría como vos.

Gustavo Romans

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo hace un par de años que soy trabajador de la educación, concepto que engloba a todos aquellos que estamos dentro de la escuela. Esta posición me da para poder tener otra mirada, ni mejor ni peor, ya que por un lado tengo la ventaja de saber más del paño, por el otro me juega en contra que mi idea puede ser muy subjetiva y correr el riesgo de defender lo indefendible.
Si bien a grandes rasgos estoy de acuerdo con lo que planteas en cuando al sueldo y la gran carga horaria que hay que trabajar para tener un sueldo digno en estos momentos, hay otras en las que no coincido. En primer lugar Gustavo creo que cometer el error, que por cierto muchos cometen, que es el de generalizar. Es cierto que puede haber algunos casos extremos de licencias “truchas”, pero son esos, ALGUNOS CASOS, tan pocos que pueden individualizarse en una comunidad como Junín donde existen 3000 trabajadores en las distintas modalidades educativas; y créeme que esas personas reciben el total repudio por el resto de la comunidad educativa.
En segundo lugar, y ahí si le pifiaste feo, los gremios, o por lo menos al que yo estoy afiliado (la FEB), no defiende ni avala este tipo de cosas, y me parece desmedido afirmar que la entidad sindical que encabezan Maria I: Sequeira y Alba Fernández “que conozcan e interpreten la letra chica del estatuto, en busca de grietas que permitan colar el robo al estado” o acusarlas de “ser encubridores, garantes y hasta en muchos casos ideólogos de trapisondas y avivadas que son un robo de dinero al Estado” porque estaríamos al frente no de una entidad gremial, sino casi a una organización filomafiosa. Además si este gremio tiene record en afiliaciones se debe a lo democrático y participativo que es; asimismo también de la gran cantidad de servicios que brinda.
Por último una aclaración a la afirmación de “Un caso muy frecuente que me han contado muchas maestras es aquel caso que, a 10 días de dar a luz toman un cargo para luego pedirse la licencia correspondiente” realidad esto no es ninguna avivada ya que uno de los artículos del estatuto lo contempla, y la fundamentación es que para acceder a un cargo de base se hace por listado público y el embarazo no puede ser contemplado como enfermedad para no tener acceso a un puesto laboral.
Julian caliva

Negro dijo...

Tres críticas al articulo:
1- Una crítica de coyuntura, pues al fin y al cabo tan importante como lo que se quiere decir con un discurso es el momento y el lugar. Por ende, en el medio de una medida de fuerza por una discusión salarial, analizarla desde las anécdotas de excepción, que refuerzan la idea del Estado esencialmente ineficiente, no solo corre el eje de discusión, sino que tiende a consolidar un prejuicio anti-estatal aún muy presente en la sociedad argentina.
2- En cuanto a la discusión planteada, resulta necesario aclarar que los gremios docentes (por lo menos en Córdoba, y me imagino que también a nivel nacional) vienen denunciando la ausencia de una política de salud laboral. Lo que existe es una desresponsabilización del estado por la salud de sus agentes, que da puede dar lugar a las anecdotas que mencionas (aunque resulte fantasiosa su magnitud) pero sobre todo, da lugar a ausencias, discontinuidades, sobre-cargas a los compañeros. Es cierto que se observa en algunos casos un crecimiento del pedido de carpeta (psiquiatricas en muchos casos), que da cuenta de los malestares que se instalan al interior del sistema en funcion de transformaciones que se vienen sosteniendo sobre la espalda de los docentes, y es esto lo que da cuenta de la desresponsabilización del estado en su obligacion de generar condiciones de trabajo dignas.
3- El planteo de los gremios publicos como cobertores delicuenciales es propio de los posiciones neoliberales, que han visto (con razon) en los sindicatos un actor protagonico de resitencia. En particular los sindicatos docentes, y la docencia como colectivo, ha actuado con la responsabilidad social en estos años de recuperacion politica, y dista de ser uno de los sectores mas beneficiados en terminos comparativos con otras fracciones de la clase trabajdaora. responsabilidad que no solo se expresa en la mesura de los reclamos, sino fundamentalmente en el apoyo y la participacion de politicas educativas tendientes a la recuperacion del sistema educativo.

Negro dijo...

Tres críticas al articulo:
1- Una crítica de coyuntura, pues al fin y al cabo tan importante como lo que se quiere decir con un discurso es el momento y el lugar. Por ende, en el medio de una medida de fuerza por una discusión salarial, analizarla desde las anécdotas de excepción, que refuerzan la idea del Estado esencialmente ineficiente, no solo corre el eje de discusión, sino que tiende a consolidar un prejuicio anti-estatal aún muy presente en la sociedad argentina.
2- En cuanto a la discusión planteada, resulta necesario aclarar que los gremios docentes (por lo menos en Córdoba, y me imagino que también a nivel nacional) vienen denunciando la ausencia de una política de salud laboral. Lo que existe es una desresponsabilización del estado por la salud de sus agentes, que da puede dar lugar a las anecdotas que mencionas (aunque resulte fantasiosa su magnitud) pero sobre todo, da lugar a ausencias, discontinuidades, sobre-cargas a los compañeros. Es cierto que se observa en algunos casos un crecimiento del pedido de carpeta (psiquiatricas en muchos casos), que da cuenta de los malestares que se instalan al interior del sistema en funcion de transformaciones que se vienen sosteniendo sobre la espalda de los docentes, y es esto lo que da cuenta de la desresponsabilización del estado en su obligacion de generar condiciones de trabajo dignas.
3- El planteo de los gremios publicos como cobertores delicuenciales es propio de los posiciones neoliberales, que han visto (con razon) en los sindicatos un actor protagonico de resitencia. En particular los sindicatos docentes, y la docencia como colectivo, ha actuado con la responsabilidad social en estos años de recuperacion politica, y dista de ser uno de los sectores mas beneficiados en terminos comparativos con otras fracciones de la clase trabajdaora. responsabilidad que no solo se expresa en la mesura de los reclamos, sino fundamentalmente en el apoyo y la participacion de politicas educativas tendientes a la recuperacion del sistema educativo.

Señor Gatica dijo...

Nunca ha habido tanta desproporción entre el dinero que el pueblo invierte en educación y los dividendos sociales producidos por esa inversión. En la Provincia de Buenos Aires la educación pública es como el Sarmiento, solo que la mayoría de las víctimas de ese tren, salen de los andenes de la escuela media sin manejar lengua, historia o matemática sin el mínimo nivel necesario para iniciarse en la vida adulta.
No es el único, pero uno de los factores determinantes de esta tragedia es la indolencia de los docentes contra esta estafa a los más pobres. Me duele decirlo porque siempre bancamos todas las luchas y las conquistas docentes. Pero los maestros laburadores y los dirigentes docentes miran para el otro lado cuando sus colegas, inspirados por una moral menemista se cagan redondamente en los hijos de los pobres.
Para un policía la comisión de un delito lleva implícito el agravante por el rol que la sociedad le confirió. ¿Cómo debe ponderarse la actitud de un maestro que malversa una conquista sectorial, ejerciendo el fraude para no trabajar durante un año?
Como dije, no es el único factor, pero si eso no cambia, nada va a cambiar.
Quizás haya que legislar para que de portero a ministro, quien se desempeñe en el sistema público de educación, envíe obligatoriamente sus hijos a la escuela de su barrio.

Anónimo dijo...

Que pocos articulos se leyeron tipo: "Querido Legislador que cobras mas de 30 lucas... casi 50... no sé... un montón..."
La unica verdad es la realidad.

Anónimo dijo...

Creo que deberíamos señalar a esos docentes simplemente como lo que dicen sus "certificados" a la comunidad. O sea, tal docente tiene carpeta por astilla en el dedo o por psiquiatría. Y, al darse a difusión, que sus vecinos y quienes sean sus allegados sientan vergüenza ajena y se los condene socialmente. Aquellos que tengan un problema real, no tendrán problemas. Ah.. Y señalar al o los profesionales que confeccionaron ese "certificado". Y sería bueno conocer la docente que tiene una boutique. Si tiene dos licencias y atiende su boutique no debería haber problemas en decir quién es.

Santi A dijo...

Lamento defender en un montón de lados el Proyecto Nacional y Popular, y que Macri ya haya arreglado con los docentes y que Sileoni y Scioli les estén dando vueltas... ¿No da un poco de vergüenza?

Anónimo dijo...

“El paro nacional al que convocaron las organizaciones gremiales debe ser la última instancia, no la primera. Eso forma parte de una Argentina que dejamos atrás”, dijo Sileoni en San Juan (Página 12, 29/02/12)

Pregunta 1: ¿Por qué esperaron a mediados de febrero para comenzar las paritarias?

Pregunta 2: Si terminan mejorando la oferta a los gremios docentes... ¿No es el Gobierno el responsable del paro?

Pregunta 3: Si Scioli no cuenta con recursos.. ¿Por qué no actualiza el Inmobiliario Rural y no se echa atrás como ya lo hizo antes? Ahí tendría suficientes recursos. (Raro que la Bertonchini -Sec Gral de la FEB- no dice nada de eso ¿Será que está casada con un chacarero?)

Pregunta 4: ¿Sileoni es funcionario de Cristina o de algún Gobierno Neo Liberal?

Anónimo dijo...

Ahh... Muy importante. Se me olvidaba... Hay que señalar socialmente también al/los médico/s corruptos que confeccionan esos certificados truchos. Por supuesto, sin calificativos. O sea, este profesional hizo el certificado para la licencia de esta/e docente que cualquiera puede apreciar lo SANA/O que está....

dr - TIC dijo...

Los docentes no hacen un paro por la corrupción del país. Corruptos hay en todos lados. Pero no es el punto.

El sueldo docente es muy bajo y vergonzoso. Si bien tengo un desprecio enorme a la corrupción creo que este artículo no refleja la verdadera razón de un paro docente.
Conozco algunos avivados que cobran sin trabajar. Con licencias truchas. Pero aún así eso no justifica el bajo sueldo.
Cómo pedir que se denuncien estas cosas si la política está detrás de todo esto? Los corruptos tienen poderosos "padrinos".

Entonces es responsabilidad de los docentes todo esto? Es responsable un docente porque un colega tiene licencia trucha? Dónde está la justicia argentina? Quién debe actuar ante esto?

El artículo solo desvía el foco de la protesta docente. No creo que sea malintencionado, pero se está mezclando agua con aceite.

Que quede bien claro: el paro es por el vergonzoso salario.
Ya la corrupción debe ser tratada por la justicia argentina. Así de simple.

No desvirtuemos el reclamo docente.